El m-commerce, mobile commerce de sus siglas en inglés, y también conocido como comercio móvil, es la adaptación de cualquier tienda online a los dispositivos móviles; en otras palabras: que nuestra tienda virtual sea accesible desde un smartphone o tablet y que, además, ofrezca una buena experiencia de usuario.
España acabó 2014 con un porcentaje de penetración móvil del 80% frente al 59% del año anterior, según datos del estudio de IAB Spain que hablan por sí solos y que dejan bastante en evidencia la creciente importancia del uso de nuestros smartphones.
Como era de esperar, dichas cifras afectan también al comercio electrónico, y mientras el ordenador siguen siendo el rey de las compras online, en 2014 el 28% de las compras en e-commerce en España se produjeron desde dispositivos móviles, según datos recogidos por Criteo en su estudio State Mobile Commerce.
Estaremos de acuerdo que ignorar estos resultados y no adaptar nuestra tienda online a móvil es exactamente lo mismo que cerrar la puerta a uno de cada cuatro clientes que entran a nuestra tienda con intención de comprar, algo que en 2014 aun hacían el 42% de e-commerce encuestados por el Observatorio eCommerce de Foro de Economía Digital.
Más allá de eso, y sin cifras oficiales al respeto, tenemos al eterno usuario multipantalla, que empieza mirando un producto o servicio en su Smartphone aprovechando el trayecto en autobús camino el trabajo, luego posiblemente vuelva a mirarlo desde el PC de la oficina, en casa puede recuperarlo desde una tablet desde donde quizás acabe haciendo la compra o, quizás, se encuentre más cómodo desde el portátil. Aun en este caso, si no disponemos de un m-commerce estaremos perdiendo claramente la oportunidad de captar a este cliente potencial.
Tipos de m-commerce: sitio web móvil y app nativa
Hasta aquí hemos visto lo imprescindible de estar presente en el mundo móvil. Ahora veamos de qué forma y con qué ventajas.
Tenemos dos maneras principales de adaptar nuestra tienda online a móvil. Por una parte, la más conocida, que es el sitio web móvil, y por la otra la app (o app nativa), que es la que conocemos popularmente por descargarnos desde los markets de nuestros smartphones.
La web móvil, que puede recibir diversos nombres según su versión (web responsive, versión móvil…) es la que estamos acostumbrados a ver en la mayoría de m-commerce que ya han dado el primer paso hacia la adaptación móvil. Podemos navegar por ella sin dificultad pero a menudo nos encontramos con problemas como la velocidad (sobre todo en las web responsive) o poca información (versión móvil); en definitiva, no ofrecen una óptima experiencia de usuario.
Las apps nativas, sin embargo, están pensadas para aprovechar todos y cada uno de los recursos de un Smartphone (GPS, cámara, etc.) y ofrecen una mayor velocidad; en otras palabras: son programas diseñados especialmente y únicamente para móvil, algo que garantiza una excelente usabilidad. Además, las apps disponen de otros extras como las notificaciones push, que nos permiten alertas de promociones u ofertas, ofreciendo así aun más valor añadido al usuario. En resumen: la app nativa dota al cliente potencial de una excelente experiencia de navegación.
Como has podido ver, es sumamente importante decidir qué tipo de m-commerce necesitas para que tu negocio sea un éxito.
En app2U somos especialistas en el desarrollo e implantación de apps para empresas de todo tipo y podemos ayudarte a incrementar las ventas de tu negocio.
Nuestros clientes ya han incorporado estas soluciones, como Europastry: líder del sector a nivel europeo de distribución de masas congeladas, más conocida por alguna marca del grupo como Yaya Maria o Frida.
